El proyecto “Producción sostenible de alimentos mediante un sistema de Agro-Acuicultura Integrada-AAI en la comunidad indígena de Jimain-Resguardo Arhuaco-Sierra Nevada de Santa Marta, Colombia”, busca atender aquellos problemas que las comunidades presentaron ante la Universidad Nacional de Colombia (U.N.).
Ganador de la Convocatoria de Extensión Solidaria 2015, este proyecto, desarrollado por el Departamento de Producción Animal, busca ser una alternativa a las actuales fuentes de proteína animal –aves, cerdos y ganado vacuno-, cuyo abastecimiento es muy limitado.
“También hay recursos vegetales, pero son más ricos en carbohidratos que en proteína: yuca, plátano, malanga y fríjoles”, explica la profesora Adriana Patricia Muñoz Ramírez, quien dirige el Grupo de investigación UN-Acuictio.
Ubicado entre los municipios de Valledupar y Pueblo Bello, departamento del Cesar, la comunidad Jimain está asentada en las estribaciones de la Sierra Nevada de Santa Marta. La conforman alrededor de 100 familias integradas por un promedio de siete personas, equivalentes a mil personas, entre quienes la mayor parte de su población son niños y jóvenes.
“Aunque nuestra meta no es la de solucionar definitivamente un problema de carácter generalizado en el país, sí buscamos ofrecer alternativas para las comunidades indígenas, que en este caso se ha enfocado en un policultivo de cachama y bocachico”, explica la docente.
Seleccionados por su alta calidad nutricional en contenido de aminoácidos y minerales, el cultivo de este tipo de peces tiene la ventaja de contar con acceso al abastecimiento de agua procedente del río Los Clavos, junto con la posibilidad de alimentarlos con suplementos fabricados por la propia comunidad, los cuales vienen a complementar la productividad natural del estanque conformada por fitoplancton, zooplancton y otros organismos, producto de la fertilización con abono orgánico.
“Aunque el proyecto piloto está conformado por dos estanques –uno de 200 y otro de 80 metros cuadrados- ubicados al lado de la escuela, nuestro objetivo es que la comunidad pueda replicarlo en sus propias huertas”, destaca la docente, quien explica que este Sistema de Agro Acuicultura Integrada viene desarrollándose con éxito en otros países.
Encaminado a integrar producciones agrícolas con el cultivo controlado de organismos en el agua –o acuicultura-, uno de los referentes más conocidos de este modelo es el cultivo de arroz y peces en Asia. En la comunidad Jimain se ha decidido trabajar el cultivo de la huerta y peces que es atendida diariamente.
“Estamos sembrando hortalizas, leguminosas y tubérculos que son bien conocidos en la región: cebollín, frijol, yuca, malanga y ñame, posteriormente se quieren añadir otros recursos vegetales”, complementa el estudiante de Maestría en Producción Animal de la U.N. Juan Carlos Durán Izquierdo, quien hace parte de la comunidad Arhuaca.
La idea, destaca la académica, es aprovechar parte de estos recursos vegetales para fabricar el suplemento, de tal manera que se optimice su uso. El agua del estanque podría ser empleada para riego de la huerta en épocas de desabastecimiento del líquido, de tal manera que los nutrientes estarían en continuo reciclaje.
“Puesto que una de nuestras preocupaciones era que este suplemento llegara a competir con el alimento que consume la comunidad, en lugar de hacer uso de la yuca o el maíz, el grupo de investigación propuso una tabla de composición nutricional a partir de elementos vegetales como las hojas de yuca, malanga o amaranto, con alto contenido de proteínas pero que no son consumidas por la comunidad”, subraya el candidato a magíster.
Una vez recolectados, los ingredientes que hacen parte del suplemento son secados al sol y luego, molidos por separado en forma manual; posteriormente son mezclados, de tal manera que se obtiene una harina que se administra a los peces.
Concebido como un proyecto desarrollado de manera conjunta entre el Grupo de Investigación UN-Acuictio y la comunidad, se busca garantizar que la iniciativa no corra la misma suerte de otro tipo de proyectos que se han querido desarrollar con comunidades de la Sierra Nevada, debido a que en la mayoría de los casos suelen omitir la necesidad de concertar con la comunidad.
El candidato a magíster subraya además la importancia de este tipo de proyectos, en la medida que puede volverse un modelo para las 80 comunidades que conforman el resguardo Arhuaco.
El proyecto del Grupo de investigación UN-Acuictio será socializado en el marco del Congreso internacional de Innovación Social, que tendrá lugar los próximos 3 y 4 de noviembre en la U.N.
(Por: Fin/JCMG/MLA)